martes, 22 de febrero de 2011

Por qué escribo

Por qué escribo
Escribo para no alimentar palomas
¿o para alimentarlas?
Escribo para contradecir mis sentimientos,
para sentirme realizado
con cada poema salido de mis entrañas.
Porque lloro en cada poema
y río en cada ironía.

Escribo por qué no conjugo el verbo aburrir,
en ninguna de sus formas

Escribo para ser la voz de los que canta
en tono menor
la diuca, el zorzal, la tenca, el chincol.
Escribo
por aquel cisne de cuello negro
que fue muerto a palos.

Escribo
después de escuchar el lamento de savia
borbotando en un roble herido.
Escribo por la araucaria
coronada con dientes de acero
traspasada su corteza,
desraizada, muerta y remplazada
por árboles clonados.
Escribo para denunciar al capitalista,
al contratista y al pobre moto sierrista
que ejecuta órdenes.

Escribo
para ser la voz de ríos cristalinos,
y de ríos amargos.
De lagos dulces y de lagos salados.
Para hablar de lluvias ácidas…
De destrucción.
Del calentamiento global
y del enfriamiento mental.
Para ser la voz de los peces,
del notro sangrante.
Escribo porque es necesario,
me es doloroso, y me es grato.

Escribo por los niños que están por nacer
Y por los niños que están por morir.

Escribo para recordar,
para no olvidar
para proyectarme en el futuro
para no morirme en el silencio
de sus ojos café.
Para que me recuerde
leyendo un verso cualquiera.
Para que me recuerden
Leyendo mis poemas
Para que me recuerden
Leyendo poemas
Leyendo poemas
Leyendo poemas
Leyendo poemas

1 comentario:

antonio dijo...

Hola profe..que buen texto, no me canso de releerlo.